En la cartelera sólo había películas de miedo y una de risa, que era su favorita. Ellos ya sabían que era Halloween y por eso les pareció normal, pero aun así querían ver la de comedia.
Cuando fueron a comprar las entradas, la chica de la taquilla les dijo que sólo estaba disponible en 3D, por lo tanto cada entrada costaría 3€ más de lo normal.
El hombre no quería gastar su dinero en una peli para verla con esas gafas que dan el efecto 3D. El amigo, sin embargo, quería verla, porque por una vez que salía de casa pensaba que merecía la pena reírse y divertirse un rato.
El hombre le comentó a su amigo:
-Prefiero ver alguna de miedo, aunque no me gusten, pero es que gastarme 3€ más... Aunque sea mi película favorita...
Y su amigo intentó convencerle, diciendo:
-Sí, ya sé que no te gustan las de miedo y que no podemos desperdiciar el dinero, pero piensa: hace muchísimo tiempo que no salíamos de casa, y por una vez que lo hacemos, deberíamos pasar un buen rato y no amargarnos ni gritar por sustos, ni nada.
Es como una persona que veía demasiado mal y para recuperar la visión necesitaba un transplante de córnea y no se operaba porque le daba miedo. Tras mucho tiempo pensándolo decide operarse, pero ya era mayor y aunque a los pocos días veía el mundo de otra manera, no pudo aguantar, y a las pocas semanas murió.
Si se hubiese operado antes, venciendo sus miedos, hubiese disfrutado mucho más cada día, viéndolo todo perfectamente.
Por eso disfruta las cosas cuando puedas, y aprovecha el momento porque no sabes cuándo tendrás otra oportunidad.
-Vale, tienes razón. Al final vemos la de risa que es la que más nos gusta, aunque tengamos que pagar un poco más, pero se trata de que esto sea divertido, ¿no?
-Exacto. Ya pensamos igual y me alegro de que sea así. Vamos a la taquilla a comprar las entradas.
Y como dijeron, fueron a la taquilla, compraron las entradas, y vieron la película que tanto querían ver. Se lo pasaron muy bien y se rieron bastante. Al final ambos coincidían en que fue una buena elección.
Como a Gabriela le gustó esta fábula, decidió hacer una redacción sobre ella, añadiendo este pareado:
Nunca sabes cuándo tendrás otra oportunidad
Así que aprovecha, da igual lo que tengas que pagar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario